Cuidados de tu perro en verano (también Teckel)

El verano es mi época favorita… y la de mi Teckel, Charlie. Le encanta tomar el sol, salir a pasear por el parque y hasta meterse en el agua cuando paseamos en la playa o por algún lago. Pero no todo es diversión: con las altas temperaturas, también vienen ciertos riesgos que tenemos que tener muy en cuenta si queremos que nuestros perritos estén sanos y cómodos.

En este post quiero compartirte lo que yo he aprendido en estos años sobre cómo cuidar a los perros en verano. Aunque hablo desde lo que vivo con Charlie, muchos de estos consejos aplican a cualquier raza.

1. Hidratación: que nunca falte agua fresca

Lo primero, y lo más importante, es asegurarse de que tu perro tenga acceso constante a agua limpia y fresca. Puede parecer básico, pero en los días más calurosos, el agua se calienta rápido o se evapora si está al aire libre. Por eso, en casa tengo varios puntos de agua: uno en la cocina que siempre está al alcance de Charlie y  otro en el patio (si estamos afuera).

Cuando salimos, siempre llevo una botella con agua para Charlie y un bebedero plegable (* link afiliados). Charlie a su edad creo que toma suficiente agua. Pero si tienes algún problema con esto, lo puedes animar sirviéndole en una superficie más baja, para que no tenga que esforzarse mucho. A veces incluso le pongo hielitos en el agua y se entretiene pescándolos.

2. Cambiar los horarios de paseo

Durante otras épocas del año, salimos a caminar tres veces al día, incluyendo al mediodía. Durante el verano, esto es diferente. Aprendí que el asfalto, en horas de sol fuerte, puede estar tan caliente que quema las patas. Para comprobarlo, hago una prueba sencilla: apoyo el dorso de mi mano en el suelo o puedes intentar poner tu pie en el suelo.  Si no puedo mantener el pie o la mano  cinco segundos, es demasiado caliente para Charlie.

Ahora salimos antes de las 7 de la mañana o después de las 6 de la tarde. (Al menos aqui ya no es tan caliente a esas horas).  Además, trato de buscar rutas con sombra y césped, y llevo agua siempre. Si veo que está muy agitado o jadeando más de lo normal, hacemos una pausa a la sombra. Los Teckel, al ir tan cerca del suelo, absorben mucho más calor del que imaginamos.

Si quieres leer más sobre nuestros paseos con Charlie y de los accesorios que usamos puedes leer en nuestro post: Cómo hacer que el primer paseo de tu cachorro teckel sea un éxito.

3. Crear espacios frescos en casa

En casa, Charlie tiene su “zona de verano”. Le busqué un rincón ventilado, lejos del sol directo. Puse una cama ligera, sin mantas, y cuando hace mucho calor, le pongo una toalla húmeda cerca.

También descubrí que, en verano, es bueno cambiar las colchas o camas por materiales más frescos, como telas de algodón o lino, que permiten mejor la circulación del aire y no retienen el calor como las mantas gruesas de invierno. Algunos perros prefieren estas opciones.

Algo que me han recomendado son las alfombrillas refrigerantes (* link afiliados) para perros. No las he probado aún, pero ya encargué una y la probaré en este verano.

4. Snacks congelados: el mejor invento del verano

Una de las cosas más divertidas que compartimos con Charlie en verano son los “snacks frios”. Son súper fáciles de hacer: mezclo yogur natural sin azúcar con trocitos de manzana, sandía o banano.

Cuando está muy caluroso, le doy su snack  y lo disfruta como si fuera un premio gourmet. Y si se utiliza una alfombrilla para lamer (* link afiliados),  el snack, aparte de refrescarlo, lo mantiene entretenido y estimulado mentalmente.

5. Bajar el ritmo en días de mucho calor

Charlie es activo. Le encanta jugar, perseguir la pelota, correr por el patio. Pero en verano, he aprendido a observarlo y a no forzar nada. Si está más tranquilo de lo normal, lo dejo descansar. Si empieza a jadear mientras juega, paro el juego y le ofrezco agua.

Hay días en que, sinceramente, lo mejor es no hacer nada. Una siesta juntos a la sombra, un poco de agua y caricias son más que suficientes. No todos los días tienen que ser una aventura.

6. Aprender a detectar un golpe de calor

Nunca me ha passado que Charlie sufra de algún golpe de calor. Sin embargo, es importante que uno como responsable por nuestros perritos, aprendamos a detectar un golpe de calor.

Un golpe de calor puede pasar en cuestión de minutos, y es muy peligroso. Algunas señales son:

• Jadeo excesivo y constante
• Saliva espesa
• Encías muy rojas
• Vómitos o debilidad
• Tambaleo o falta de coordinación

Ante cualquiera de estos signos, mejor actuar rápido y contactar con un veterinario.

7. ¿Vacaciones con perro? ¡Sí se puede!

Viajar con Charlie en verano también ha sido una experiencia linda, pero con muchos ajustes. Siempre reviso si el alojamiento acepta mascotas, si hay sombra en el lugar, y si hay servicios veterinarios cerca. También llevo su camita, su transportín (*link afiliados) comida habitual, sus premios y su juguete favorito: una pelota de cuerda que no suelta ni dormido.

No todos los destinos son ideales para ir con un perro, y menos en pleno verano. Pero con planificación y algo de flexibilidad, se puede pasar increíble.

🐾 En resumen…

Cuidar a tu perro en verano no tiene que ser complicado, pero sí requiere atención. Cada detalle cuenta: el agua, la sombra, los horarios, la observación. Y aunque este artículo está escrito desde mi experiencia con Charlie, un Teckel encantador, la mayoría de los consejos aplican a cualquier perro.

La clave está en prestar atención a lo que necesitan, estar disponibles, y no olvidar que para ellos somos el centro de su mundo. El verano puede ser una época maravillosa para crear recuerdos con tu perro.

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